Lo que a veces debo recordarme...

Bueno... he roto mi ordenador y mis manitas han dejado de diseñar en digital durante estos días (¡¡menos mal que tenía todo lo del día de la madre listo!!). Por lo que entre taza y taza le robo el ordenador a mi novio (que no tiene ni un solo programa para diseñar...) y miro los mails. ¡Que dura es la vida sin ordenador por dió! 

Sin ordenador y tantísimas cosas por hacer... Estoy con pedidos, terminando de preparar todas las cositas para esas mamis tan especiales y pensando en las fotos para subir a la web... Esto de montar empresa y emprender no es nada fácil, no señores. 

Todo el mundo dice que menuda suerte la mía de dedicarme a algo que me llena y que es propio, y tienen toda la razón, pero también hay muchas cosas malas, como las horas que pasa una sola entre semana trabajando, menos mal que tengo a mi Manuela (estoy segura que los vecinos deben pensar que me paso los días con alguna amiga, pero no señores, Manuela es mi perra, lo que pasa que yo la trato como si fuese mi BFF jajaja). Y bueno, los días pasan y mientras lucho por sacar esto palante pues unos días son mejores y otros peores.

Y a veces hay días en los que vemos que las cosas malas pesan más que las buenas. Pero esto no solo me pasa a mi ehhh, nos pasa a todos, que lo se yo. Y entonces tengo que recordarme a mi misma que lo estoy haciendo de PUTA MADRE, igual que tú que estás leyéndome ahora mismo. Que la vida hoy en día esta muy complicada y hay que buscarle siempre las cosas buenas a las malas. Así que ponte guapa/o y sal a la calle a tomarte una birra o un cafetito con amigos y recuerda siempre lo mucho que vales.

Y ale, a vivir que son dos días y hay que disfrutarlos.